
La historia de Canela, una perrita Golden Retriever de tres años, no quedó en la impunidad. Luego de sobrevivir a un brutal ataque con arma blanca en un parque del fraccionamiento El Molino, en la ciudad de Puebla, su agresor deberá cumplir con una serie de medidas judiciales y pagar una reparación económica.
El ataque ocurrió el 25 de octubre de 2022, mientras Canela paseaba en un área verde de la colonia Vicente Guerrero. Al acercarse al hoy imputado —cuya identidad no fue revelada—, el sujeto presuntamente la agredió con un objeto punzocortante, provocándole una herida grave en el cuello. La agresión puso en riesgo su vida y causó indignación entre vecinos y defensores de los derechos animales.
Gracias a las pruebas recabadas por la Fiscalía General del Estado, se logró que el agresor aceptara una reparación integral del daño por un monto de 50 mil pesos, además de acatar varias medidas impuestas por la autoridad judicial.
Como parte de la suspensión condicional del proceso, el responsable deberá firmar de manera periódica ante el juzgado, mantenerse alejado de la denunciante, recibir tratamiento psicológico y donar un kit de prueba de sida felina al Instituto de Bienestar Animal de Puebla.
Aunque el camino hacia la justicia para los animales sigue siendo largo, casos como el de Canela muestran que sí es posible sentar precedentes cuando hay denuncia, evidencia y presión social. La violencia contra seres vivos, sin importar su especie, no debe pasar desapercibida.