La ciudad de Puebla se encuentra dividida por un tema controversial como lo es la despenalización del aborto; por un lado, se encuentra la arquidiócesis de Puebla, en coordinación con grupos e instituciones de aspiración católica, junto a religiones como los evangelistas y cristianas quienes defienden la vida desde la concepción. El Arzobispo Víctor Sánchez Espinoza retomo las palabras del papa Francisco quien señaló que quienes comenten el aborto son sicarios.

Por otro lado, las diputadas Rocío García Olmedo (PRI), Estefanía Rodríguez Sandoval (MORENA), así como la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco, en conjunto con activistas, quienes piden la despenalización del aborto y piden que se aborde este tema como un problema de salud pública, pero que también se respete el derecho de la mujer a decidir. Ante estos las diputadas presentaron una iniciativa para que el aborto no sea solamente legal, sino que también sea reconocido como un derecho de las mujeres y piden que en los hospitales públicos la interrupción del embarazo sea gratuito siempre y cuando se realice en las primeras doce semanas de gestación.

En esta misma reforma se plantea que personal médico y de enfermería con convicciones religiosas y les corresponda practicar alguna interrupción legal del embarazo podrán excusarse de intervenir en el procedimiento y tendrán la obligación de referir el caso a personal no objetor.

Ante estas iniciativas el día de hoy se llevó a cabo la última sesión ordinaria de la LX Legislatura, pero ante la previsión de marchas feministas el congreso fue cercado con mallas metálicas por los miembros de la policía estatal, de igual forma se cerró la circulación vehicular y peatonal en las calles 3 y 5 Poniente, de la 16 de septiembre a la 3 Sur.